El flamante Jefe del Seguro Integral de Salud, Edmundo Beteta, informa
sobre las medidas que se toman en el marco de la reorganización del SIS:
auditoría de la Contraloría, instalación de la Comisión Interventora, y
la revisión de todos los contratos y convenios celebrados por la
institución.
Por otra parte, resaltó la importancia de
transparentar y fortalecer todo lo concerniente a la afiliación, por el
bien de nuestros asegurados, y del Aseguramiento Universal en Salud.
La Contraloría General detectó que a nivel nacional centros y postas de salud no cumplen con las disposiciones y normas vigentes por lo que existen riesgos para una adecuada atención médica de miles de ciudadanos y sus familias.
El ente de control dio cuenta que las postas no cuentan con equipos ni personal suficiente. Ocho de cada diez postas de salud que existen en el país carecen de equipamiento mínimo para atender a los pacientes, y cinco de cada diez no cuentan con suficiente personal médico.
La entidad llegó a la conclusión al inspeccionar entre el 4 y 8 de julio último 1,544 centros y postas de salud en todo el país.
Al verificar la situación en que se encuentran, la Contraloría advirtió que estos recintos “no cumplen con las disposiciones y normas vigentes por lo que existen riesgos para una adecuada atención médica de miles de ciudadanos y sus familias”.
La Contraloría General detectó que a nivel nacional centros y postas de salud no cumplen con las disposiciones y normas vigentes por lo que existen riesgos para una adecuada atención médica de miles de ciudadanos y sus familias.
"Me uno a la indignación de esta paciente
Shirley Meléndez, desde acá mi solidaridad con ella y su familia",
destacó Edgar Alarcón.
Contraloría General inicia auditoría al Servicio de Urología del Hospital Almenara (VIDEO)
17 de Agosto del 2016 - 17:06 » Textos: Redacción Multimedia » Fotos: Correo
El contralor general,Edgar Alarcón dispuso hoy el inicio de una auditoría a los Servicios de Urología y de Diagnóstico por Imágenes del Hospital Guillermo Almenara Irigoyen, de ESSALUD, para
verificar la calidad de la atención médica que recibió la ciudadana
Shirley Meléndez y otros pacientes que acuden a ese nosocomio.
Tras aunarse a las muestras de indignación y solidaridad por lo ocurrido con la joven, el Contralor General informó que la auditoría tiene el propósito de supervisar los procesos de atención que recibieron todos los pacientes quirúrgicos en los mencionados servicios, durante el periodo enero a julio de 2016.
La comisión auditora se acreditó ayer, martes 16 de agosto, mediante un documento remitido a la presidenta ejecutiva de ESSALUD, Virginia Baffigo,
a fin de que se brinden las facilidades necesarias para que la comisión
auditora acceda a información que le permita verificar la calidad de
atención médica y determinar posibles responsabilidades de funcionarios o
médicos.
NO SE ENTORPECE INVERSIONES
El contralor general Edgar Alarcón señaló
más temprano que las acciones de control de este organismo no buscan
entorpecer a los procesos de inversión, sino que, más bien, intentan
evitar que se incurra en alguna irregularidad. "Definitivamente
no vamos a entorpecer porque la forma de actuación es una especie de un
gestor, un consultor del que toma la decisión en el área logística,
quizá en el área de ejecución de obra, haber si se cumplen las
condiciones pactadas en un contrato en una obra", indicó a TV Perú.
Edgar Alarcón explicó que se debe entender la prevención como un acompañamiento de la Contraloría General de la República para alertar riesgos y hacer correcciones. "Desde un inicio no voy a sancionar, no voy a cuestionar, no voy a concluir en responsabilidades", sostuvo.
Caso en la Contraloría.
“Al margen de la auditoría médica, este caso ya ingresó a la
Contraloría. Esto obedece a la necesidad enérgica de corroborar la
veracidad de las graves denuncias y fue remitido a Gestión de Servicios
en aras de la transparencia del proceso de investigación. Se ha
designado a un nuevo profesional, a cargo del servicio de Urología al
hospital Almenara”.
Antes de que la Contraloría indicara hallazgos, Minsa solicitó a empresa
superación de vicios ocultos en algunas ambulancias. Así lo informó
Gelberth Revilla, director ejecutivo de la Dirección General de
Infraestructura y Equipamiento del Ministerio de Salud (Minsa), en
entrevista en Canal N.
Señaló que el Minsa instaló un plan de
control posterior a la entrega de ambulancias, para su correcto uso y
funcionamiento. Recalcó que las unidades adquiridas son nuevas.
El Ministerio de Salud (Minsa) se pronunció, mediante un comunicado, en
relación a la información emitida en un programa periodístico ayer
respecto al estado actual de las ambulancias distribuidas a las regiones
durante el periodo 2013-2014.
Respecto al cumplimiento de las especificaciones técnicas:
1. El lote de 214 ambulancias adquiridas el año 2013 por el Ministerio
de Salud, realizada mediante la Adjudicación de Menor Cuantía N°
65-2013/MINSA; se ejecutó cumpliendo estrictamente los procedimientos
establecidos en la Ley de Contrataciones del Estado.
2. Existen directivas del Ministerio de Salud (MINSA) que determinan las
especificaciones técnicas de las ambulancias, tanto a nivel rural como
urbano. Para los aspectos mecánico-automotrices, las normas técnicas
están establecidas por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones
(MTC). Para los aspectos de equipamiento médico-clínico, las normas las
establece el MINSA. Cualquier contrato que se haga de compra de
ambulancias deben considerar estas dos normas técnicas.
3. Para el caso específico de las ambulancias rurales, también se ha
considerado la normativa americana (triple K) que es un estándar
internacional utilizado en Estados Unidos y otros países de la región.
4. Con el fin de garantizar el cumplimiento de las especificaciones
técnicas, las ambulancias fueron sometidas a 13 pruebas, incluso más de
las requeridas en las bases; que fueron realizadas por el Instituto de
Transportes de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), Lidercom y
otros ingenieros especialistas contratados exclusivamente para ello.
Estas pruebas fueron supervisadas por la Dirección General de
Infraestructura, Equipamiento y Mantenimiento (DGIEM), órgano técnico
del Minsa.
5. La garantía comprende un período de 3 años y cubre el deterioro de la
ambulancia por defectos, fallas de fabricación o vicios ocultos no
evidenciados al momento de la recepción o conformidad.
6. El estado y las condiciones en las que se mantiene una ambulancia no
dependen solamente de las especificaciones técnicas, sino,
principalmente, del mantenimiento y el uso que se les dé a los
vehículos.
7. El estado actual de las ambulancias utilizadas al interior del país,
es responsabilidad exclusiva de los respectivos Gobiernos Regionales, de
las que dependen las Direcciones Regionales de Salud, las Unidades
Ejecutoras y los establecimientos de salud.
8. La DGIEM cuenta con información de que existen diferentes
irregularidades en el uso de las ambulancias, como la recarga de
combustible inadecuado, mal uso del embrague, su utilización por parte
de choferes que no fueron capacitados para ello; inclusive están siendo
utilizadas para el transporte de personal y materiales, lo que no
corresponde a este tipo de vehículos.
9. Por otro lado, existen unidades ejecutoras y establecimientos que si
vienen cumpliendo con el adecuado mantenimiento de las ambulancias,
razón por la cual no presentan ningún tipo de desperfectos o fallas de
origen.
10. Debido al mal uso que se les viene dando a las ambulancias, en el
futuro el MINSA entregará ambulancias siempre y cuando las regiones
cuenten con el Sistema de Atención Médica Móvil de Urgencia (SAMU
Regional), con presupuesto y personal asignado.
Respecto a la acción de control al proceso de adquisición de las ambulancias:
1. La Contraloría General de la República inició una acción de control
al proceso de adquisición de las ambulancias que aún no ha concluido y
que se desarrolla de manera reservada.
2. El Minsa expresa su compromiso de que cuando concluya la acción de
control y de darse el caso, se adoptarán las medidas administrativas y
legales que correspondan, en resguardo de los recursos públicos del
sector Salud.
El Hospital de la Policía ha colapsado. Efectivos en actividad y
retiro son atendidos en medio de grandes carencias, como forados en
pasadizos, ascensores en mal estado, sistema de desagüe colapsado y
techos a punto de caer.
Estas deficiencias fueron detectadas por la Contraloría de la
República en el primer día de la veeduría realizada en el Hospital PNP
Luis N. Sáenz, ubicado en la avenida Brasil, en Jesús María. En el
proceso, que forma parte del "Operativo de salud", se verifican los
posibles riesgos en nosocomios.
"Hemos comprobado que los ascensores para el traslado de pacientes
operados no funcionan, por lo que deben ser llevados en brazos", afirmó
el vicecontralor Edgar Alarcón.
El equipo auditor detectó que el área de emergencias ha excedido su
capacidad de atención. Solo cuentan con 50 camillas, cuando diariamente
cerca de 300 pacientes acuden al nosocomio. Además, el hospital posee
diez ambulancias y dos galones y medio diarios de combustible para
movilizarse.
Después del periodo de auditoría, la Contraloría emitirá un informe
preliminar donde brindará recomendaciones para mejorar la atención.
Inspección
La Contraloría también inspeccionó el Hospital Militar.
El órgano de control visitará los nosocomios de las Fuerzas Armadas.
Por su parte, el ministro del Interior, Wilfredo Pedraza, anunció
que para fines del 2014 estará listo el nuevo Hospital de la Policía.
Lima, jul. 10 (ANDINA).
La Contraloría General de la República inició hoy una actividad de
control para verificar las condiciones en las que prestan sus servicios
médicos el Hospital Militar Central “Coronel Luis Arias Schreiber” y el
Hospital de la Policía Nacional del Perú “Luis Nicasio Sáenz”.
Personal de la Contraloría General de la República realiza acción de control en Hospital de la PNP.
El vicecontralor Edgar Alarcón, quien dirigió la supervisión, explicó que el
objetivo es determinar el grado de implementación de las normas
técnicas de salud e identificar posibles riesgos que afecten a las
aéreas consideradas "críticas".
Entre estas se encuentran las salas de emergencias, farmacia,
atención ambulatoria, hospitalización, cuidados intensivos e intermedios
y anestesiología, que tienen una importante demanda y un alto nivel de
complejidad, anotó.
El funcionario señaló que, además de las visitas, la veeduría
contempla la revisión de documentos técnicos, entrevistas con personal
médico y con los usuarios de ambos nosocomios.
Deficiencias
Durante el primer día de visita al Hospital de la Policía Nacional, el equipo auditor comprobó que el
área de Emergencias ha excedido en su capacidad de atención ya que solo
cuenta con 50 camillas y su promedio diario de atención es de 300
pacientes.
“También hemos comprobado que los ascensores para el traslado de
pacientes operados no funcionan debido a lo cual deben ser llevados en
brazos, lo que representa un riesgo para su recuperación. Esta situación
es insostenible y debe ser corregida con urgencia”, manifestó el
vicecontralor.
Alarcón agregó que este hospital solo tiene diez ambulancias y apenas
dos galones y medio diarios de combustible para su movilización.
Al respecto, señaló que el director del nosocomio informó que solo
tiene 20 mil soles de caja chica disponibles para gastos
administrativos.
"La Contraloría General de la República espera tener dentro
de 30 días un informe preliminar con los resultados de esta actividad
de control y las recomendaciones para contribuir al
mejoramiento de la calidad de las prestaciones de salud que brindan
ambos nosocomios a la comunidad militar y policial", indicó Alarcón.
El Hospital de la Policía Nacional del Perú “Luis Nicasio Sáenz”
dispuso en el 2012 de un Presupuesto Institucional Modificado de S/. 29
millones 624 mil 236 soles.
El Hospital Militar Central “Coronel Luis Arias Schreiber” ejecutó
en el mismo año un presupuesto institucional modificado de S/. 23
millones 115 mil 825 soles.
El vicecontralor precisó que esta acción de control forma parte del
Operativo de la Salud que se inició el año 2012 en Lima y provincias. El
equipo auditor está integrado por auditores médicos del Departamento de
Salud de la Contraloría, concluyó.
Tiene 50 camillas cuando su promedio diario de atención es de 300 pacientes. La Contraloría inició actividad de control también en el Hospital Militar
La Contraloría inició una acción de control
en el Hospital de la Policía y en el Hospital Militar. (Foto
referencial: Archivo El Comercio)
El área de Emergencias del Hospital de la Policía Nacional del Perú, en Jesús María, ha excedido su capacidad de atención, pues solo cuenta con 50 camillas y su promedio diario de atención es de 300 pacientes. Esa situación comprobó la Contraloría General de la República en una visita realizada hoy como parte del inicio de una actividad de control en dicho nosocomio.
“También hemos comprobado que los ascensores para el traslado de
pacientes operados no funcionan debido a lo cual deben ser llevados en
brazos, lo que representa un riesgo para su recuperación. Esta situación
es insostenible y debe ser corregida con urgencia”, informó el
vicecontralor Edgar Alarcón.
El citado nosocomio solo tiene diez ambulancias y apenas dos galones y medio diarios de combustible para su movilización,
según la entidad fiscalizadora. Esta dio cuenta también de que el
director del hospital de la PNP informó que tiene una caja chica de solo
20 mil soles para gastos administrativos.
La inspección también se realizará en el Hospital Militar Central.
En ambos casos se busca verificar las condiciones de los servicios
médicos y revisar documentos técnicos, entrevistas con personal médico y
con los usuarios.
También se determinará el grado de implementación de las normas técnicas de salud e identificará los posibles riesgos que afecten a áreas consideradas como críticas.
Por ejemplo, las salas de emergencia, farmacia, atención ambulatoria,
hospitalización, cuidados intensivos e intermedios y anestesiología.
La Contraloría tendría un informe preliminar en 30 días
en donde brindaría además recomendaciones para contribuir al
mejoramiento de la calidad de las prestaciones de salud que brindan
ambos hospitales.
Lima, may. 10 (ANDINA).
La Comisión de Salud del Congreso solicitará a la Mesa Directiva un
equipo técnico que apoye la investigación sobre presuntas
irregularidades en la construcción e implementación de hospitales del
Ministerio de Salud y EsSalud entre 2006 y 2011, adelantó hoy su
titular, Karla Schaeffer.
Congresista Karla Schaeffer.
Según explicó a la Agencia Andina,
los integrantes del equipo técnico, que serían dos o tres ingenieros o
arquitectos, serán solicitados este lunes con el objetivo de “analizar y
evaluar posibles hechos lamentables” y verificar in situ las
edificaciones.
“Esta investigación amerita tener un equipo técnico con recursos para
visitar los sitios. No se hará ningún show mediático, irán quienes
tienen que ir, en este caso los especialistas, para hacer su trabajo”,
manifestó.
Dijo que hasta el momento la comisión ha recopilado información de
las instituciones comprendidas, así como de la Contraloría General de la
República, y ahora corresponde contrastarla.
Sostuvo que como comisión aún no pueden pronunciarse sobre puntuales
irregularidades, pues todavía no se tiene un informe preliminar. Para
ello, remarcó, será importante el trabajo que el equipo técnico
desarrolle.
También se solicitará la información que tenga al respecto la
megacomisión del Congreso, a fin de ahorrar tiempo y recursos, refirió.
El pleno del Congreso acordó ayer ampliar por 90 días la facultad
investigadora de la Comisión de Salud para indagar las supuestas
irregularidades en la construcción y equipamiento de hospitales en el
período 2006-2011.
Lima, jun. 11 (ANDINA).
La Contraloría demandó por la vía civil a cinco exfuncionarios de
EsSalud que ocasionaron pérdidas económicas por más de tres millones
700,000 nuevos soles al Estado durante la construcción del Hospital II
Luis Negreiros Vega, ubicado en el Callao.
Contraloría General de la República. Foto: ANDINA/Norman Córdova.
El objetivo de la demanda es obtener una reparación económica a
favor del Estado, informó la institución a través de una nota de prensa.
La Contraloría, durante la acción de control realizada en 2011,
determinó que los exfuncionarios otorgaron indebidamente a la empresa
contratista ampliaciones de plazo hasta por 180 días para no cobrarle la
penalidad que correspondía por incumplimiento del contrato.
La empresa tenía que obtener un informe técnico favorable de
Osinergmin para instalar un sistema de petróleo y GLP en el hospital en
un plazo determinado, pero solicitó en cuatro ocasiones consecutivas las
ampliaciones de plazo, por 45 días cada una de ellas, para cumplir con
esta parte del contrato.
Según la documentación revisada, indica la Contraloría, la
contratista presentó argumentos insuficientes e injustificables para
obtener las ampliaciones del plazo y los exfuncionarios de EsSalud las
aprobaron aduciendo “causas de fuerza mayor o caso fortuito”, que
afrontaba la empresa, las cuales no fueron precisadas ni sustentadas
técnicamente.
A pesar de las ampliaciones concedidas, la empresa no cumplió con
la instalación del sistema de petróleo y GLP que permitiría al hospital
contar con el servicio de agua caliente para los diferentes servicios
médicos.
La institución explicó que cuando venció el plazo otorgado se firmó
una adenda para que la empresa no estuviera obligada a cumplir con esta
labor; suscribieron ambas partes una orden de cambio para reducir del
monto contratado el importe de 124,000 soles por la no ejecución del
Sistema de Petróleo y GLP.
El Hospital II Luis Negreiros Vega no cuenta en la actualidad con
el sistema de petróleo y GLP, cuya implementación retrasó la obra en 180
días.
De haberse instalado el sistema en 2011 se habría gastado 181,000
soles, es decir, 57,000 soles más de lo que le hubiera costado
inicialmente.
La construcción del hospital se realizó a través de un convenio con
organismos internacionales. La obra se debió ejecutar en 360 días
invirtiendo 37.1 millones de soles, según el contrato inicial.
Al final, tardaron prácticamente el doble de tiempo en entregar la obra.