Oswaldo Salaverry García, director general del Centro Nacional de Salud Intercultural (Censi), señaló que según los análisis del Censo Indígena de 2007, el 71.3 por ciento de la población indígena prefiere ser atendido por un médico o enfermera.
"Ello demuestra que la presencia del Minsa es necesaria para apoyar a las personas
que son las más pobres entre los pobres, y las más excluidas entre los excluidos", subrayó.
Detalló que el 79 por ciento de los establecimientos cuenta con personal procedente de la propia etnia, siendo el 21 por ciento procedente de otros grupos.
Para reforzar el trabajo que efectúa el personal de salud, el 48.7 por ciento de las poblaciones indígenas están afiliados al Seguro Integral de Salud (SIS), el 46.5 por ciento no está afiliado a ninguna clase de seguro, el 3.7 está afiliado al Seguro Social, y el 1.3 tiene otra clase de seguro.
Los motivos de consultas más frecuentes entre los grupos indígenas se relacionan con diarreas, desnutrición, anemia, malaria, paludismo, neumonía, enfermedades de transmisión sexual y fiebre amarilla.
Multisectorial
En mérito de la I Reunión Multisectorial “Construcción participativa de una política de salud intercultural”, que se desarrolló recientemente en Lima, el funcionario dio a conocer estos detalles ante los representantes de diferentes sectores.
Ello con la finalidad de reforzar y evidenciar el trabajo que realiza el Minsa a favor de las comunidades indígenas u originarias de nuestro país, así como a los afro descendientes.
De acuerdo al Censo, el 15.9 por ciento de la población peruana pertenece a algún grupo étnico indígena, destacando la población quechua.
Indica que un hogar puede considerarse indígena si se toma en cuenta que el jefe de familia, o bien el padre o abuelo, habla una lengua diferente al castellano.
(FIN) NDP/LBH/FPQ
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